Un impactante caso médico ha generado preocupación entre especialistas y usuarios de redes sociales: un hombre quedó paralizado tras pasar 30 minutos sentado en el inodoro usando su teléfono celular.
Lo que parecía una práctica cotidiana y sin riesgo, terminó afectando gravemente su salud neurológica.
Según expertos, mantener una posición flexionada por tanto tiempo puede reducir significativamente el flujo sanguíneo hacia la médula espinal y provocar compresión en nervios esenciales.
Esta combinación puede derivar, en casos extremos, en condiciones severas como la isquemia espinal y el síndrome de la cola de caballo, ambos trastornos que afectan la movilidad y el control nervioso.
Este incidente no es aislado. Refleja un peligro cada vez más común asociado a los hábitos modernos: el uso prolongado del celular en el baño.
Más allá de ser una distracción, el permanecer demasiado tiempo sentado en una postura inadecuada mientras se sostiene y observa una pantalla puede tener consecuencias neurológicas serias.
Los profesionales de la salud advierten sobre la importancia de prestar atención a la postura y limitar el tiempo de permanencia en el inodoro. El baño debe ser un lugar de paso, no una sala de espera digital.
Como consejo esencial, se recomienda evitar pasar largos ratos sentado en el baño con el celular. Hacerlo no solo protege la columna vertebral, sino también los nervios que controlan funciones básicas del cuerpo.
¡Tu columna y tus nervios te lo agradecerán!
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